Myriam Schepers, directora general, fundó Prefamac en 1988. La exportación ahora representa del 90 al 95% del volumen de negocios, con la mayor parte de las ventas a otros continentes. Hay que volver a ganar ese mercado todos los días, lo cual es impensable sin una innovación continua.
Hoy en día, Prefamac Chocolate Machines no solo tiene una excelente reputación como fabricante de máquinas: como empresa, también queremos aportar nuestro granito de arena en el ámbito social. Prefamac como pionero logró no menos de 17 objetivos específicos de Responsabilidad Social Corporativa.
Prefamac exporta a más de 100 países. Los principales clientes fuera de Europa son India, Pakistán, los estados árabes, los Estadus Unidos, Japón y varios otros países asiáticos. ¿Qué explica este éxito internacional?
El chocolate es un producto delicado. Las mejores máquinas de Prefamac, construidas con los mejores materiales e ingeniería, garantizan un resultado superior. Incluso en circunstancias difíciles, como humedad excepcional, altas temperaturas y en períodos extremadamente ocupados.
Un segundo factor importante es que Prefamac siempre piensa y diseña en función de las necesidades concretas de los chocolateros y operarios de las empresas. La ergonomía, la facilidad de mantenimiento y la seguridad son puntos clave de atención al construir cualquier máquina nueva. El consumo de energía debe limitarse al mínimo.
El tercer factor de éxito es la “orientación al servicio” de todos los empleados. Prefamac Chocolate Machines piensa constantemente en sus clientes también fuera del horario de oficina. La innovación no es algo que simplemente ocurre ‘entre las 9 y las 5’. En Prefamac, la innovación se lleva a cabo en el co-diseño y la co-creación con los clientes, con el fin de crear continuamente productos finales nuevos y flexibles para el futuro.
